1. INTRODUCCIÓN
En 1985, el cine comercial y juvenil estaba en un momento de auge. El éxito de títulos como “E.T. El Extraterrestre” había dejado claro que el futuro de la industria ya no estaba en manos del público adulto, sino de los más jóvenes, que abarrotaban las salas en busca de historias repletas de fantasía y aventura ideadas expresamente para ellos. En este contexto, con la interacción de talentos como Steven Spielberg (productor), Richard Donner (director) o Chris Columbus (guionista), llegó a las pantallas “Los Goonies” una cinta llamada a convertirse en un título generacional, una historia, que ahora, 25 años después, aquellos que tuvieron la fortuna de verla en la gran pantalla siguen recordando con cariño y admiración.
2. STEVEN SPIELBERG Y EL CINE INFANTIL
En 1982 cuando Steven Spielberg dirigió “E.T. El Extraterrestre” se encontró con varias dificultades a la hora de convencer al estudio, Universal Pictures, para que invirtiera su dinero en una cinta marcadamente infantil y juvenil. Hasta ese momento el cine destinado a este tipo de público y protagonizado principalmente por un reparto de jóvenes actores solía contar con pequeños presupuestos y su estreno estaba destinado a las matinées. El desbordante éxito de “E.T.” cambió por completo este panorama. Los estudios empezaron a demandar este tipo de cintas, y las salas se llenaron de historias protagonizadas por niños, donde los adultos tenían un papel muy secundario o inexistente. Como es habitual, muchas de estas películas se basaron en canibalizar de manera evidente y sin creatividad los patrones marcados por Steven Spielberg, sin embargo otras supieron hacer avanzar este incipiente subgénero. El propio Spielberg produjo durante esta década algunos de sus títulos más famosos, como “Gremlins”, “Regreso al Futuro”, “El Secreto de la Pirámide”, o “Bigfoot y los Henderson”.
Justo después de “Gremlins”, el productor ideó una historia acerca de un grupo de amigos que se embarcaban en la búsqueda de un legendario tesoro pirata, con el fin de ayudar a sus padres a pagar una deuda que estaba a punto de tirar abajo el tranquilo pueblo costero en el que vivían, los muelles de Goon. Como muchas de los temas que barajaba Spielberg por aquella época, la idea principal era partir de los viejos seriales para reformularlos y darles un empaque moderno de cara a las nuevas generaciones.
3. CHRIS COLUMBUS
Para desarrollar aquel argumento, el productor contrató a un joven escritor llamado Chris Columbus, quien ya había participado en el guión de “Gremlins”. Columbus, poco a poco, y bajo la influencia de Spielberg, pasó a convertirse en un guionista y, posteriormente, director especializado en historias protagonizadas por niños. De su pluma salió también el libreto de “El Secreto de la Pirámide”, y años más tarde fue el responsable del éxito de las dos primeras partes de “Solo en Casa” y la franquicia de Harry Potter. Para “Los Goonies”, Columbus escribió un inspirado guión en el que un heterogéneo grupo de personajes debía superar con ingenio, humor y valentía una constante sucesión de pruebas cada vez más peligrosas, mientras eran perseguidos por una banda de criminales que quería arrebatarles el tesoro. Como si de un videojuego se tratara (al fin y al cabo, los ordenadores personales estaban ya adentrándose en cada casa y los jóvenes de la época empezaban a descubrir los placeres que este tipo de entretenimientos podían ofrecer), los protagonistas no podían pasar a la siguiente fase de su aventura sin haber resuelto la anterior.
4. RICHARD DONNER
La dirección de la película fue asignada a Richard Donner, un realizador que se encontraba en aquel momento en la cresta de la ola de su carrera como cineasta. Formado durante más de una década en el terreno de la televisión, en series como “The Twilight Zone”, “The Man from U.N.C.L.E.”, “La Isla de Guilligan”, “Perry Mason”, “El Fugitivo” o “Kojak”, en 1976 entró con letras doradas en la Historia del Cine gracias a su trabajo en “La Profecía”. A continuación llegaron otros títulos en los que comercialidad y calidad se combinaban generando cócteles explosivos: “Superman”, “Lady Halcón” o “Arma Letal”. “Los Goonies” se integró en este contexto, suponiendo un triple reto al realizador. En primer lugar se trataba de una historia infantil, protagonizada por niños, muchos de ellos actores nóveles sin demasiada experiencia en el campo interpretativo. Donner se las apañó para que cada uno tuviera su particularismo y conectara con el público. En segundo lugar era una cinta de aventuras, donde efectos especiales y fantasía debían darse la mano. Aquí el director aprovechó el tono nostálgico de los seriales para dar un toque de clasicismo que permitiera que la película fuera al mismo tiempo moderna e intemporal (a día de hoy sigue siendo perfectamente válida, ni siquiera aspectos tan marcados como la estética de los 80 parecen haber envejecido mal). Finalmente, como hemos comentado, se trata de un guión episódico, estructurado en base a la sucesión de una serie de set pieces que perfectamente podían servir de manera independiente para crear un parque temático. La notable dirección de actores y el sentido del ritmo de Donner hicieron que todo discurriera de manera fluida, manteniendo al espectador enganchado a la pantalla gracias a la atractiva y complementaria personalidad de cada personaje y la sensación de acción constante.
5. EL REPARTO
Como muchas de las películas infantiles de la época, el gran secreto de “Los Goonies” radica en una excelente labor de casting. Cada miembro de la pandilla contaba con una personalidad definida y necesitaba de un actor de características muy determinadas para interpretarlo. Para algunos, esta película supuso el principio de una incipiente carrera, para otros sus 15 minutos de gloria, sin embargo todos ellos pueden lucir con orgullo en sus filmografías el haber participado en “Los Goonies”.








Frente a los jóvenes aventureros tenemos al grupo de villanos de opereta formado por Los Fratelli. Como si estuvieran salidos de un comic o una serie de dibujos animados, Los Fratelli no van más allá de la caricatura, enfrentándose entre ellos o siendo víctimas de las jugarretas de los niños. Gran parte del encanto de los personajes viene dado, una vez más, por la excelente labor de casting, escogiéndose para estos papeles a tres actores de físico muy peculiar: Robert Davi, Joe Pantoliano y Anne Ramsey. Robert Davi es un secundario recurrente en todo tipo de películas y series de televisión gracias a su rostro marcado por la viruela, recordado especialmente por dos títulos de finales de los 80, “La Jungla de Cristal” y “Licencia para Matar”. Por su parte Joe Pantoliano es un actor de mayor reputación. Es cierto que lo hemos podido ver en películas muy comerciales, interpretando papeles tan o más caricaturescos que el de “Los Goonies”, pero su paso por “El Imperio del Sol”, “Matrix” o “Memento” lo ha situado como actor de culto. Por último, Anne Damsey era una actriz que empezó en el cine a principios de los años 70, pero que alcanzó la fama casi con 60 años. Previamente a “Los Goonies” la habíamos podido ver en “Camino del Sur” o “La Gran Pelea”, y posteriormente repitió papel de madre huraña en “Tira a Mamá del Tren”.
6. WILLY EL TUERTO Y LOS MUELLES DE GOON
Dos presencias importantes a lo largo de la película son Willie el Tuerto y los muelles de Goon. Las referencias al primero son constantes a lo largo de la película, incluso Mikey entabla una íntima conversación con él a medida que se van acercando a su tesoro. Entre el niño y el pirata se crea una extraña conexión, como si el fantasma de Willie esperara que fuera Mikey quien descubriera su tesoro y le liberara de su prisión en la cueva (aunque para ello Mikey y sus amigos deban demostrar que son dignos de la recompensa superando las intrincadas pruebas preparadas por el pirata y su tripulación). Willie el Tuerto representa la aventura, la fantasía, la disconformidad con los avatares del destino.
Por otro lado, los muelles de Goon representan los valores promulgados por Steven Spielberg en estas películas. Valores heredados de la década de los 50, basados en la defensa de la comunidad, la unión familiar y la construcción de América como país de las oportunidades (donde el esfuerzo y la honestidad acaban teniendo su recompensa). De hecho, los villanos de la historia, Los Fratelli, por un lado, y el banquero Elgin Perkins por otro, suponen una traición a estos valores. Los Fratelli son una familia disfuncional, con continuos enfrentamientos entre ellos y por lo tanto abocados a la delincuencia, mientras que los Perkins se basan en el capitalismo feroz, en la ambición desmedida y egoísta, y por lo tanto no son merecedores de un lugar apacible y privilegiado como los muelles de Goon. En los referente a las familias de los protagonistas, es cierto que al principio de la cinta evidencia una cierta desatención hacia sus hijos debido a la situación particular de pérdida de sus hogares, pero la aventura del tesoro produce un restablecimiento de valores y prioridades entre los adultos, (antes incluso de su conclusión, es decir, cuando los niños son capaces de entregar a sus padres el tesoro y evitar el desahucio). Donner subraya el apartado emocional en el reencuentro final, sirviendo así de cierre a los particularismos concretos de cada uno de los personajes.
7. DAVE GRUSIN Y CINDY LAUPER
“Los Goonies” es un magnífico ejemplo de película artesanal, donde todos los elementos están dirigidos a subrayar el carácter infantil y aventurero de la historia. Sin embargo, hay un elemento fundamental que nos gustaría remarcar aquí, la música.
De acuerdo al canon marcado por John Williams, una vez más, en “E.T. El Extraterrestre”, la partitura de la película responde a una recreación del modelo sinfónico del romanticismo tardío implantado en los años 30 y 40 por compositores europeos como Erich Wolfgang Korngold o Max Steiner (de hecho hay varias referencias concretas a la música de estos dos maestros, al igual que al propio Williams, a través del personaje de “Sloth” y su afición al cine clásico de aventuras). Curiosamente, para “Los Goonies” se escogió a un músico a priori un tanto apartado del prisma de Steven Spielberg, Dave Grusin. Procedente del terreno del jazz, Grusin se había caracterizado especialmente por sus trabajos para Sydney Pollack, sin embargo, aquí demostró que podía variar perfectamente de registro, adaptándose por completo al tipo de partitura que necesitaba esta película. De acuerdo al canon, Grusin preparó una serie de leitmotivs que definían no sólo a algunos de los personajes principales, sino también ambientes determinados y reiterativos. Todos ellos se combinaron y desarrollaron a lo largo de todo el metraje hasta formar un amplio tapiz musical. De esta manera, la película se abre con la huida de los hermanos Fratelli, en el que encontramos ya un tema frenético que va a marcar la idea de persecución, así como la presentación de algunos de los principales leitmotivs. Frente a la simplicidad de algunos temas identificativos de los personajes, Grusin desarrolló una partitura repleta de colorido, que alterna momentos épicos y heroicos (la ya mencionada persecución inicial, o el enfrentamiento en el barco tras el rescate de “Gordi” y “Sloth”), con otros más intimistas (todas las incursiones del tema de los muelles de Goon, especialmente en la reunión final), humorísticos (sobre todo los guiños metacinematográficos a 007, Superman, o el Capitán Blood) o fantasmagóricos (las referencias a Willie el Tuerto a medida que se van acercando al tesoro, ofreciendo su versión completa tras el descubrimiento del barco y los restos de toda la tripulación pirata).
En “Los Goonies” encontramos también la incorporación de canciones pop propias de la época, dirigidas principalmente al público juvenil que fue a ver la película. De todas ellas destaca especialmente “The Goonies 'R' Good Enough” de Cindy Lauper. La canción fue compuesta expresamente para la película y pasó a convertirse en su tema principal, pese a que sólo aparece de manera testimonial y breve en una de las escenas de la casa antes del inicio de la aventura. Como dato anecdótico tenemos que en el video clip de la canción aparecen también los actores de la película interpretando a sus personajes, algo poco corriente en aquel momento, donde si acaso se utilizaban escenas de la película como material de recurso.
La banda sonora de la película tuvo una primera edición en 1985, donde se priorizaba la aparición de los temas poperos, quedando como testigo de la partitura de Dave Grusin apenas un par de temas. El propio Grusin recuperó más tarde algún tema suelto en recopilatorios de su música, pero pese a la continua demanda de los fans, la edición de la partitura completa se fue aplazando en el tiempo. Ha sido recientemente, con motivo de este 25 aniversario, que el sello Varése Sarabande ha contentado el sueño de muchos, presentando una lujosa presentación de la música.
8. LA SECUELA QUE NUNCA FUE
“Los Goonies” obtuvo un éxito muy superior a lo esperado por los productores. El público juvenil se dejó llevar por esta historia de aventuras y salió de la sala con esperanza de saber cómo continuaba la historia y de ver nuevas aventuras de sus protagonistas. En varias ocasiones se ha levantado el rumor de una secuela, incluso recientemente, se planteó la idea de reunir al reparto original y embarcarlos en otra búsqueda de un tesoro. Sin embargo, ninguno de estos intentos han ido más allá de una mera intención, y difícilmente creemos que a estas alturas se llegue a producir una segunda parte, lo que no cierra la posibilidad de que, en esta época de remakes y reboots, algún productor ávido de números, pueda llegar a promover una nueva versión con un reparto y un equipo completamente diferente.
9. UNA PELÍCULA GENERACIONAL
“Los Goonies” fue una cinta generacional, uno de esos títulos cuyo recuerdo ha servido para establecer lazos entre personas de diferentes nacionalidades que sin conocerse de nada comparten su pasión y nostalgia por esta peculiar película de aventuras.
Qué grandes recuerdos de infancia conlleva esta película. En el caso de Josh Brolin, al menos yo, lo redescubrí en El Hombre Sin Sombra, de Paul Verhoeven.
ResponderEliminarMuy buen artículo. Dudo que se haga un reboot de Los Goonies, es como hacerlo de ET. Son títulos demasiado míticos.
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