jueves, 29 de julio de 2010

VAMPIROS Y HOMBRES LOBO EN EL CINE. UNA LUCHA MILENARIA (Parte II).

1. EL REVISIONISMO DE LOS AÑOS 70 Y 80

blaculaposterblacula scream

Tras los cambios sociales producidos a finales de los años 60 y a lo largo de los 70, el cine en general y el terror en particular se verían afectados por nuevas perspectivas artísticas, en las que los mitos clásicos se tuvieron que adaptar al espíritu rupturista y renovador de la contracultura. Como respuesta al clamor de los grupos minoritarios a la hora de tener voz en la sociedad y en la cultura Estadounidense, las artes, y el cine entre ellas, se abrieron a la incorporación de obras creadas para y por estos sectores. Así hizo su aparición en Hollywood la “blaxploitation”, donde generalmente los patrones del cine comercial pasaron a ser reinterpretados por artistas de raza negra, entre ellos el cine de terror. En 1972 el actor Williams Marshall protagonizó “Blacula”, ofreciendo al primer vampiro negro del cine de Hollywood. La cinta obtuvo un éxito considerable, produciéndose un año más tarde su secuela, “Grita, Blacula, Grita”, en la que participó otra estrella de este nuevo cine, la espectacular Pam Grier.

blood-for-dracula-soundtrack-cover-art1

El mundo de la modernidad tendría también espacio para los vampiros. Bajo la tutela de Andy Warhol, Paul Morrisey dirigió una visión erotizada y decadente de Drácula en la cinta de 1974 “Sangre para Drácula”. Aquí el actor Udo Kier interpretaba a un amanerado Conde Drácula, quien ahora sólo puede alimentarse de la, cada vez más escasa, sangre de vírgenes. Morrisey no duda en hacer poblar su cinta de referencias a la convulsa situación política de Estados Unidos, a la promiscuidad sexual imperante, incluso al uso de las drogas, ya que la necesidad de sangre del Conde le convierte en un drogadicto en pleno síndrome de abstinencia.

martin-movie-poster-19771

A esta moda revisionista se uniría también el padre del cine de zombies, George A. Romero, quien en 1977 realizó una de sus mejores películas con “Martin”, sobre un joven adolescente que está convencido de ser un vampiro. Con una puesta en escena casi documentalista, Romero prescindió de los componentes fantásticos anteriores y ofreció una cinta de marcado realismo. A lo largo del metraje de la cinta, el director desmonta uno por uno los arquetipos del vampirismo, presentando a su protagonista como un joven perturbado, inadaptado social y sexualmente, que necesita crearse una falsa identidad para justificar su desarraigo existencial.

dracula badhamNosferatu herzog

Frente a estas propuestas más arriesgadas, en 1979 el director John Badham volvió una vez más a la fuente y llevó a cabo una nueva adaptación de la novela de Bram Stoker. En esta ocasión el encargado de encarnar al Conde fue el actor Frank Langhella, quien se esforzó en recuperar el carácter aristocrático del personaje. La cinta fue recibida con alabanzas y, pese a sus numerosas licencias, durante bastante tiempo fue considerada la adaptación más fiel a la obra de Stoker. Curiosamente, el mismo año en que Badham recuperaba al “Drácula” original, Werner Herzog proponía un remake del “Nosferatu” de Murnau, con su actor fetiche, Klaus Kinski, con una caracterización fiel a la de Max Schrek en la original.

nosferatu herzog 2

Herzog, gran admirador de la obra de Murnau, se las apañó para ofrecer un sentido homenaje a la versión original, pero dejando espacio para su discurso personal como autor cinematográfico. La cinta obtuvo un gran éxito y años más tarde, Klaus Kinski llegó a protagonizar una secuela titulada “Nosferatu en Venecia”, aunque ya sin la participación de Herzog en la dirección.

El_Misterio_De_Salems_Lot_-_1979_2salemslot

Para cerrar esta moda vampírica de 1979, Tobe Hooper adaptó para la pequeña pantalla la novela de Stephen King, “El Misterio de Salem´s Lot”. Tomando como referencia los elementos clásicos de la tradición nos encontramos con una actualización de la mitología, con un vampiro líder a la semejanza de Nosferatu incluido. Dada la popularidad de la novela, el material rodado fue resumido hasta alcanzar la duración de un largometraje, siendo estrenado en cines a nivel internacional. En España esta versión recortada, sin embargo, fue absurdamente titulada “Phantasma 2”, haciendo referencia a otro título de terror de éxito en aquel momento.

aullidos[1] 

Si en 1979 nos encontrábamos con este compendio de títulos vampíricos, 1981 fue un año fundamental para la renovación del cine de Hombres Lobo. Dos títulos estrenados ese año sirvieron de puente entre la tradición y el nuevo cine de terror de esta década. El primero fue “Aullidos”, de Joe Dante, donde por primera vez no nos encontramos con licántropos devorados por la culpabilidad, sino hombres lobos realmente orgullosos de serlo, y que, para seguir rompiendo estereotipos, son capaces de transformarse siempre que lo desean y no únicamente en las noches de luna llena. Esta película contó con un total de seis secuelas, a cada cual peor que la anterior.

un_hombre_lobo_americano_en_londres

El otro título fue “Un Hombre Lobo Americano en Londres” de John Landis, donde terror, humor y drama se daban la mano para generar un clásico instantáneo. Landis alternó momentos realmente aterradores (como el ataque en los páramos, la secuencia en el metro o la transformación) con propuestas más humorísticas (como los guiños musicales con canciones como “Blue Moon”, “Moondance” o “Bad Moon Rising”, o los encuentros del protagonista con su amigo muerto en un cine porno), e incluso con escenas de marcado carácter dramático, como el cariz trágico que va tomando la historia de amor y el fatídico desenlace del protagonista.

howling_shot7lwerewo06

Gran parte del éxito tanto de “Aullidos” como de “Un Hombre Lobo Americano en Londres” vino determinado también por la excelencia de sus efectos especiales y maquillaje. Aquí hay que destacar dos nombres, Rick Baker y Rob Bottin. El primero estaba asignado a la cinta de Joe Dante, sin embargo su compromiso anterior con Landis le llevó a abandonar el proyecto cuando la película de éste se puso finalmente en marcha, dejando a su discípulo Rob Bottin al frente de “Aullidos”. Bottin hizo un trabajo excepcional, consiguiendo una espectacular transformación que se extiende durante varios minutos en pantalla. Sin embargo, la más recordada fue la presentada por Baker en “Un Hombre Lobo Americano en Londres”. Gracias a este trabajo se crearon en los Oscars una nueva candidatura dedicada al maquillaje, siendo Baker el primero en recibir este galardón.

wolfen2wolfen003

Junto al éxito de las dos anteriores, encontramos también ese mismo año otro título reseñable, “Lobos Humanos” de Michael Wadleigh y John Hancock, una cinta más modesta, basada en la novela “El Despetar de los Lobos” de Whitley Striber, que buscaba el origen de la licantropía en la tradición de los nativos norteamericanos. En esta ocasión, más que una maldición ancestral se trataba de un símbolo de la unión del ser humano con la naturaleza.

1983-El-ansia-Tony-Scott-USA-2Ansia deneuve-sarandon2

Siguiendo con las visiones alternativas del vampirismo, en 1983 nos encontramos con el debut en la gran pantalla de Tony Scott con la excelente “El Ansia”. En esta historia acerca del miedo a envejecer y los inconvenientes de la inmortalidad, Scott sacó provecho de la tradición de vampiresas lésbicas, con una antológica escena entre Catherine Deneuve y Susan Sarandon. La película destacaba también por su estilizada puesta en escena, marcando uno de los primeros ejemplos de la influencia del lenguaje del videoclip en el cine.

Lifeforce

Un año más tarde, de nuevo el director Tobe Hooper fusionó el subgénero de invasiones extraterrestres con el vampírico en “Lifeforce”, con la salvedad de que en lugar de sangre, aquí se alimentan de fuerza vital. Basada en la novela de Colin Wilson “Los Vampiros del Espacio”, la cinta es realmente un crisol de elementos tomados de diferentes subgéneros de terror y ciencia ficción, ya que en ella podemos encontrar también elementos procedentes del cine apocalíptico, las películas de zombies, las producciones de la Hammer (con la serie del Dr. Quatermass a la cabeza) o las paranoias anticomunistas de los años 50.

En Compañía de Lobos

Al éxito de “Aullidos” y de “Un Hombre Lobo Americano en Londres” hay que sumarle otra interesante propuesta de licántropos en el cine, “En Compañía de Lobos”, en la que, en 1984, el director Neil Jordan adaptó diferentes relatos de la escritora Angela Carter. Las referencias al mundo de los cuentos de hadas, especialmente a “Caperucita Roja” marcaron el tono más literario e intelectual de este acercamiento. Partiendo del relato de Charles Perrault, aquí el hombre lobo es presentado como el hombre libidinoso que se aprovecha del despertar sexual de las adolescentes, sin embargo, Angela Carter, opta por darle un giro feminista, haciendo que sea Caperucita quien tome las riendas del encuentro y, por lo tanto, de su sexualidad.

noche-de-miedo-1985the-lost-boys

Dirigida a un público adolescente, en 1985, encontrábamos “Noche de Miedo”, un tributo modernizador de los títulos clásicos, con la presencia de un extraordinario Roddy McDowall como sucedáneo de Van Helsin. La película de marcado tono nostálgico buscaba servir de puente entre las películas clásicas de los años 40 y 50 y la nueva audiencia juvenil de los 80. En la misma línea de “Noche de Miedo”, tenemos la cinta de 1987 “Jóvenes Ocultos”, donde también se nos ofrece una historia a medio camino entre la tradición y el revisionismo modernizador dirigido a un público principalmente adolescente. La incorporación de nuevos elementos, como la música rock o las referencias al comic (fuente de conocimiento de los nuevos cazavampiros) servían precisamente para dejar claras las intenciones y los destinatarios de la película.

Vampire Hunter Dmr vampire2

También las culturas orientales cuentan con sus versiones de los vampiros. El mundo del anime proponía una traslación del mito a la estética japonesa con la adaptación en 1985 del manga “Vampire Hunter D”. Ese mismo año se estrenaba “Mr. Vampire”, una cinta de culto del cine de Hong Kong, donde además se respeta una de las características de los vampiros chinos, su caminar en forma de pequeños saltos. Ambas películas pasaron a convertirse en títulos de culto, siendo la primera uno de los títulos clave en el boom del anime en occidente a finales de los 80. Ambientada en un futuro neogótico plagado no sólo de vampiros, sino también de mutantes y demonios, la cinta opta por mezclar elementos postapocalípticos con una cierta herencia del espagueti western. Por otro lado, “Mr. Vampire” es una película poco conocida en nuestro país, pero de gran éxito en China (llegando a inspirar tres secuelas a lo largo de la década). La cinta se inscribe dentro de un grupo de películas orientales (“Encuentros con el Más Allá”, “Una Historia China de Fantasmas”) en las que se mezclaban elementos fantásticos, artes marciales y comedia.

Miedo Azul

Aunque no tan determinante como 1981, el 85 fue otro año de amplia profusión de licántropos en pantalla. Ese año se estrenaba “Miedo Azul”, adaptación de un relato de Stephen King titulado “El Ciclo del Hombre Lobo”. Menos lograda que otras versiones cinematográficas de la obra literaria de este escritor, la cinta es un nuevo ejemplo de acercamiento nostálgico a la figura del licántropo, más interesado en el homenaje a los clásicos que en presentar un modelo innovador.

teen-wolf

El hombre lobo adolescente regresaría también ese año en clave más humorística con “Teen Wolf”. Más que seguir los pasos de “Yo Fui un Hombre Lobo Adolescente”, la película se ajustaba al modelo de películas juveniles de la época, convirtiéndose la temática fantástica en una excusa para tratar temas que se pondrían de moda en la segunda mitad de la década, como la integración dentro del instituto, gracias a títulos como “No Puedes Comprar mi Amor” o “Una Maravilla con Clase”. Michael J. Fox rodó esta cinta justo antes de alcanzar el éxito con “Regreso al Futuro”, algo que ayudó al devenir comercial de la película, llegando incluso a inspirar una secuela en 1987, esta vez con Jason Bateman como protagonista, y una serie de animación para televisión.

Lady Halcón

De 1985 es también “Lady Halcón”, donde podemos encontrar el tema del licántropo aunque tocado de manera más tangencial. La maldición que acompaña a la pareja formada por el Capitán Etienne Navarre e Isabeau D’Anjou, obliga al primero a transformase en lobo cada noche, apenas viendo a su amada unos segundos antes del amanecer. Aunque nunca se le da tratamiento de hombre lobo en la película, su vinculación con el folclore medieval acerca de los licántropos es incuestionable.

Una-pandilla-alucinante01

El hombre Lobo y Drácula, como representantes del catálogo de monstruos clásicos del cine, volvieron a aparecer en otro título juvenil de finales de los 80, “Una Pandilla Alucinante”. Aquí un grupo de jóvenes amantes del cine de terror se las tendrán que ver con la plana mayor de las criaturas del ciclo de la Universal, que llegan a su ciudad con intención de hacer de las suyas. Modesta en sus pretensiones pero realmente entretenida, la película ha sabido mantener el tipo ante el paso del tiempo, convirtiéndose en un título de culto.

besosdevampirobesos de vampiro_10

Un poco en la línea de aquel “Martin” de George Romero, el director Robert Bierman presentó en 1988 la comedia “Besos de Vampiro”, una parodia de la cultura yuppie, en la que un estresado y perturbado publicista (interpretado por Nicholas Cage) se obsesiona con la idea de estar convirtiéndose en un vampiro después de haber sido mordido en el cuello por una amante ocasional en un momento de pasión. El protagonista cree sufrir todos los síntomas del vampirismo (sed de sangre, fotofobia), llegando incluso a comprarse unos dientes falsos en una tienda de disfraces. Pese a su escaso presupuesto y su limitada distribución internacional, la cinta es recordada especialmente por la secuencia en la que Nicholas Cage se comió una cucaracha real, pensando que de esa manera conectaba mejor con su personaje.

2. EL REGRESO A LOS CLÁSICOS DE LOS 90

dracula coppola 2

1992 fue un año de resurgir de la temática vampírica gracias al éxito de la adaptación de “Drácula” por parte de Francis Ford Coppola. La cinta triunfó en taquilla e hizo que la atención del público regresara a una concepción del terror en general, y del mundo vampírico en particular, más clásica, alejada de las modernidades de los años 80. Coppola rodó una cinta que bebía de la novela de Stroker (aunque también tomándose muchas libertades creativas), pero también de las versiones cinematográficas anteriores. A lo largo de su metraje, el director de “El Padrino” no duda en hacer guiños al “Nosferatu” de Murnau, o a los “Dracula” de Tod Browning y John Badham, añadiendo a la historia original un trasfondo de historia romántica entre el Conde y Mina Harker.

cronos

Un año más tarde, para su debut como director con “Cronos”, Guillermo del Toro escogió una historia de claras referencias vampíricas y con guiños a la obra de Stoker, como, por ejemplo, ese momento en el que el ansia por la sangre lleva al protagonista a lamer sangre del suelo (una imagen que recuerda a la avidez con la que el Conde bebe la sangre de Jonathan Harper después de que éste se corte afeitándose). Con esta película Del Toro demostró ser un gran conocedor de las claves del género, al mismo tiempo que un autor con una visión renovadora.

ENTREVISTA%20CON%20EL%20VAMPIRO

El éxito del “Drácula” de Coppola llevó a los productores a buscar otros referentes literarios con los que seguir explotando la moda vampírica, y lo encontraron en la novela de Anne Rice “Entrevista con el Vampiro”. De corte clasicista, la obra de Jordan mantenía las características de la novela original, con una lujosa y barroca puesta en escena, recibiendo el visto bueno de la autora, después de que ésta no escatimara en descalificativos a la elección de Tom Cruise como Lestat. Desgraciadamente, la línea abierta por esta película de Neil Jordan no tuvo demasiada continuidad, quedando la franquicia truncada tras el retraso y posterior fracaso comercial de su secuela, “La Reina de los Condenados” (curiosamente la tercera de las novelas de esta autora, dejando en el tintero la más interesante, pero también mucho más ambiciosa y compleja “Lestat, el Vampiro”).

lobo

La moda del cine de terror clásico iniciada tras el éxito del “Dracula” de Francis Ford Coppola también sirvió para rescatar a otros monstruos como la criatura de Frankenstein (en versión de Kenneth Branagh, producida por el propio Coppola), La Momia (en un acercamiento más aventurero a cargo de Stephen Hopkins), y, por supuesto el Hombre Lobo. El director Mike Nichols (célebre por sus dramas de personajes como “¿Quién Teme a Virginia Woolf?”, “El Graduado” o “Conocimiento Carnal”) daba el salto al género fantástico con “Lobo”, protagonizada por Jack Nicholson y Michelle Pfeiffer, y con un austero maquillaje obra de Rick Baker. La película buscaba ser un acercamiento al competitivo mundo empresarial, relacionando la cultura yuppie con la agresividad del lobo, pero, si bien cuenta con buenas ideas de partida y una excelente química entre sus dos actores protagonistas, en su segunda mitad pierde el rumbo y se adentra en terrenos un tanto bochornosos, como ese aparatoso enfrentamiento final entre el protagonista y su ambicioso pupilo.

addiction

Temas reales como la adicción a las drogas o el sida (ambos ya apuntados en la cinta de Coppola) fueron aprovechados también para dar una nueva vuelta de tuerca al mito del vampiro en la cinta de Abel Ferrara de 1995 “The Addiction”. Rodada en blanco y negro, la cinta buscaba alejarse de los clichés del género, para ofrecer una lectura filosófica del vampirismo. Con esta historia, Ferrara quiso también reflexionar acerca de la degradación moral de la sociedad, algo que ya había hecho en títulos anteriores suyos, como “El Rey de Nueva York” o “Teniente Corrupto”.

Vampiro%20Suelto%20En%20Brooklyn

Menos lograda resultaba “Un Vampiro Suelto en Brooklyn”, revisión en clave afroamericana de la novela de “Drácula” dirigida en 1995 por Wes Craven y protagonizada por Eddie Murphy. Curiosamente, mientras Craven buscaba hacer un cambio de registro y rodar una comedia, Murphy se esforzó en dar seriedad y presencia a su personaje, sin que ninguno de los dos lograra alcanzar su objetivo.

abierto hasta el amanecerAbierto hasta el Amanecer2

Otro título que marcaba un punto y aparte en el género, al menos a nivel comercial, fue “Abierto hasta el Amanecer”, donde las fuerzas aunadas de Quentin Tarantino y Robert Rodríguez reexaminaban las características básicas de los vampiros y, de paso, presentaban un nuevo icono para la posteridad, la vampiresa Satanico Pandemonium. La cinta comienza como un thriller trepidante, para a mitad de la película dar un giro inesperado hacia el género de terror, con preferencia por la exageración propia del cine gore (no por nada uno de los personajes, Sex Machine, está interpretado por el experto en efectos y maquillaje, Tom Savini).

buffy1992buffy

La imagen de los vampiros de la transición entre el siglo XX y el XXI estuvo marcada en parte por el éxito de la serie de televisión “Buffy, la Cazavampiros”. Si bien la primera versión cinematográfica fue un fracaso sonado, su reconversión a la pequeña pantalla redimió al personaje y a su creador Joss Whedon. Durante siete temporadas, las aventuras de esta ex-animadora reconvertida en cazavampiros estuvieron marcadas por unos guiones ágiles y originales, así como la aparición de un nutrido grupo de personajes antológicos. A día de hoy, la serie se mantiene como un título de culto, siendo la inspiradora de múltiples series de temática fantásticas que llegaron posteriormente.

dracula mel brooksbracula

En el apartado de humor, en la segunda mitad de los 90 encontramos dos parodias del personaje del Conde Drácula, surgidas una vez más a partir del éxito de la adaptación de Francis Ford Coppola. En primer lugar, “Drácula, un Muerto Muy Contento y Feliz”, dirigida por Mel Brooks y protagonizada por Leslie Nielsen. Brooks había sido el autor de una de las mejores parodias del cine de terror clásico con su fundamental “El Jovencito Frankenstein”, y para esta nueva película se fijó tanto en la versión de Coppola como en la original de Tod Browning, sin embargo, el resultado fue mucho menos lucido que en su caricatura de la criatura de Mary Shelley, cayendo en general en chistes demasiado burdos y facilones. Por otro lado, en nuestro país, el humorista Chiquito de la Calzada emprendería su segundo rol protagonista en la gran pantalla con “Brácula”, entendida como una secuela de la exitosa “Aquí Llega Condemor, el Pecador de la Pradera”. Tras la cámara se situaba nuevamente Álvaro Sáenz de Heredia, un realizador habituado a dirigir este tipo de vehículos para cómicos como el dúo “Martes y Trece” (“Aquí Huele a Muerto”, “El Robobo de la Jojoya”).

bladeblade-trinity_snipes

La moda de las adaptaciones de personajes del comic a la gran pantalla serviría para recuperar en 1998 a un personaje clásico de los 70, “Blade”. Interpretado en esta nueva encarnación por el actor Wesley Snipes, la cinta era básicamente un vehículo para la exhibición de las habilidades marciales de su protagonista, aunque dejó espacio para ofrecer una visión urbanita y modernizada (representada por el personaje de Stephen Dorff) en contraste con la vieja guardia aristocrática y europeísta (liderada ni más ni menos que por Udo Kier).

VAMPIROsCARPENTERVAMPIROS de CARPENTER

Con todos los directores (propios y ajenos al género) que habían aportado su granito de arena al desarrollo del vampirismo en el cine, a finales de la década de los 90 llegaba la visión de uno de los imprescindibles del terror, John Carpenter. “Vampiros” respondía a las características propias del cine de esta autor, con un acercamiento bastante clásico pero adornado con algunos toques de originalidad (como su estética propia del western), destacando en ella el carisma de vampiro líder, Valek, interpretado por Thomas Ian Griffith, y la mala baba de su protagonista, un siempre sarcástico James Woods.

VAMPIROS de CARPENTER2

“FELLINI 8 ½”. CONFESIONES DE UN MENTIROSO FABULADOR

8-1-2-poster

1. INTRODUCCIÓN

El cine ha contado en multitud de ocasiones y desde diferentes puntos de vista las bambalinas de la industria. Lo que hay detrás de la realización de una película puede llegar a convertirse en algo tan interesante como la película en sí. Sin embargo, lo que no se prodiga tanto es la autoreflexión, artistas que hagan películas sobre su propio universo creativo. Eso es lo que hace especial una película como “Fellini 8 ½”.

2. EL TÍTULO

fellini mastroiani loren

Es indudable que la filmografía de Federico Fellini cuenta con una personalidad propia, que ha querido ser imitada por muchos artistas con posterioridad, pero que nunca ha llegado a ser igualada. Pocos cineastas pueden presumir de tener un estilo, unas temáticas, una visión del mundo y del cine tan personal e intransferible. Y de eso habla precisamente esta película, ya incluso desde su mismo título. 8 y ½ hace referencia al puesto que ocupa este trabajo en el orden cronológico de su filmografía. Previamente había rodado seis películas, dos cortometrajes y había dirigido a medias con Alberto Lattuada su opera prima, “Luces de Variedades”, lo que venía a dar una suma de 7 ½.

3. REALIDAD, RECUERDO Y ENSOÑACIÓN

812fellini6

Formado dentro de la escuela de Neorrealismo, Fellini nunca abandono su interés por el mundo que le rodeaba, pero su sensibilidad le llevaba a mostrarlo de una manera más abstracta, pasada por el tamiz de su propia sensibilidad como autor, sus sueños y sus recuerdos. En “8 ½” se nos presenta a Guido Anselmi, un célebre director de cine que atraviesa una crisis de creatividad, esta excusa servía a Fellini para hacer una reflexión personal sobre su cine y apuntar el camino que iba a seguir su filmografía de ahí en adelante, convirtiendo a este trabajo en un precoz compendio de lo que la crítica lleva intentando dilucidar desde entonces.

marcello3

A lo largo de las 2 horas y 20 minutos de metraje, Fellini desafía al espectador entremezclando realidad, recuerdo y ensoñación como si todo fuera una misma cosa. La película empieza con el protagonista atrapado en un coche en medio de un atasco, de pronto el vehículo empieza a llenarse de humo y ante la mirada inexpresiva del resto de los conductores, consigue huir por la ventana y sale volando de ese lugar angustioso. Más tarde, Guido se irá cruzando con los fantasmas de sus padres, recordará su despertar sexual y fantaseará con reunir en un harén a las diferentes mujeres de su vida, todo ello mientras está rodeado por su esposa, su amante y todo el equipo de rodaje de la película que lo acosan sin parar para que responda a preguntas sobre la película.

4. FELLINI VISTO POR FELLINI

812fellini15

Es en este Guido Anselmi donde encontramos un remedo del propio Fellini. No es sólo que el tipo de películas de personaje haga referencia a las del director, también podemos encontrar apuntes biográficos, como su carácter mujeriego, su relación con su mujer (la también actriz Giulietta Masina) y obsesiones personales como ese fetiche erótico preadolescente de Saraghina, recuperado posteriormente de manera recurrente, por ejemplo en la estanquera de “Amarcord”. Al mismo tiempo, la película es toda una declaración de intenciones en lo que a puesta en escena e imaginería se refiere. Fellini parte de la realidad y la deforma, la convierte en algo grotesco, paródico e irreal. En este sentido, la película tiene la paradoja de ser la respuesta más sincera de un mentiroso fabulador.

5. MARCELLO MASTROIANNI

marcello

Dentro de esta ilusión, de esta falsedad con la que juega Fellini, destaca la presencia de su alterego en la pantalla, el actor Marcello Mastroianni, el actor que mejor supo reflejar la personalidad del director en sus películas. Guido es tan seductor y farsante como Fellini, pero con el físico, la elegancia y el porte más refinados de Martoianni.

6. LAS MUJERES Y LA SECUENCIA DEL HARÉN

harem

El reparto femenino es amplio y heterogéneo, desde la vulgar exuberancia de su amante Claudia o de Saraghina, hasta la discreta y elegante belleza de su mujer, Luisa, pasando por el sex appeal cinematográfico de Claudia, o la turbadora presencia de Gloria, la amante del productor. Esta obsesión por el género femenino y la fantasía de macho dominante quedaron magníficamente reflejadas en una de las mejores secuencias, la del harén, donde Guido fantasea con reunir a todas las mujeres de su vida en un único espacio de armonía y sumisión.

7. LA INDUSTIA DEL CINE ITALIANO

812fellini2

“8 ½” supone también una reflexión sobre la industria del cine italiano. Tras las penurias de la postguerra, la presencia de cineastas como Vitorio DeSica, Luchino Visconti, Roberto Rosselini o el propio Fellini había dado al país una gran reputación artística en todo el mundo. El cine italiano era visto como un referente de vanguardia y modernidad, sin embargo, Fellini no duda en evidenciar la hipocresía de una industria plagada de hipócritas sin criterio artístico que simplemente se dejan llevar por el talento de otros para recoger las migajas del éxito, representándolos como una ociosa élite dentro de la nueva burguesía del país.

8. LA CRÍTICA CINEMATOGRÁFICA

carini

Fellini tampoco sintió piedad por la crítica literaria de la época, y adelantándose a lo que se pudiera decir de su película creó la figura de Carini, el crítico cinematográfico, quien continuamente está desprestigiando el guión de Guido con prepotentes peroratas intelectuales. Esto era un arma arrojadiza hacia personas concretas como Guido Aristraco, el fundador de la revista Cinema Nuovo, quien no era precisamente un seguidor de Fellini, pero también una forma particular del cineasta de reírse de su propia película.

9. IGLESIA Y SOCIEDAD

812fellini10

Otras referencias ineludibles en el cine de Federico Fellini y por lo tanto obligatorias en “8 ½” eran a la iglesia y a la sociedad de la época. Educado en un colegio católico, Fellini siempre se mostró disconforme con la Iglesia y en sus películas le gustaba provocar al restrictivo moralismo de ésta con un discurso de desbordante sexualidad. La Italia que describe el cineasta está anquilosada en la censura y el sentimiento de culpa propio del catolicismo, algo que afecta al propio Guido Anselmi para quien parte de su bloqueo creativo viene determinado por los remordimientos que le genera su infidelidad.

10. MÚSICA Y PASARELA FINAL

pasarela

Uno de los mejores acompañantes en este viaje que nos propone Federico Fellini es la siempre pletórica y evocadora música de Nino Rota. Rota fue uno de los más destacados músicos del cine italiano y claro antecedente y maestro de Ennio Morricone. Rota puso música a la segunda película de Fellini (la primera rodada en solitario), “El Jeque Blanco”, y permanecieron juntos hasta el fallecimiento del músico en 1979. Fueron las partituras de este compositor las que dieron ese tono provincial y circense a las películas del cineasta y, por supuesto, en “8 ½” no podía ser menos. En multitud de secuencias de la película encontramos la presencia de una banda que acompaña a los personajes con su música, lo que indica la importancia de este componente para el director. El momento cumbre llegaba con el clímax final, donde todos los personajes de la película se despiden mientras desfilan por la pasarela del falso decorado, acompañados por la música de Nino Rota, en un cierre absolutamente épico para la película.

11. INFLUENCIA POSTERIOR

All%20That%20Jazz

Este ejercicio de autoanálisis ha sido imitado posteriormente por otros cineastas, algunos con más éxito que otros. Entre los más destacados podemos escoger dos nombres, Bob Fosse y Woody Allen. Fosse, un autor vinculado principalmente al género del musical, ofrecería su obra maestra en 1979 con la cinta “All That Jazz”. En ella, un despótico director de musicales hace compendio de toda su vida cuando ésta está a punto de llegar a su final en medio de la preparación de su último espectáculo. Sus infidelidades, su relación distante con su hija, su obsesión y perfeccionismo en el trabajo, todo confluye en una narración onírica, donde la realidad y el mundo subjetivo del protagonista se funden en un viaje fúnebre.

deconstructing harry2

Por otro lado, Allen, admirador confeso de Fellini, analizó su propia obra, sus obsesiones y sus complejas relaciones sentimentales en la cinta “Desmontando a Harry”. Aquí también el mundo creativo del autor, su vida cotidiana y su obra se confunden en un amalgama de breves historias que acaban integrándose en un discurso personal y totalmente coherente. El homenaje a Fellini realizado tanto por Fosse como por Allen les llevaría a cerrar sus respectivas películas también con una pasarela en la que se reúnen los diferentes personajes de ese universo creativo que es la vida y la obra del artista.

12. EL MUSICAL

nine

En 1982, con libreto de Arthur Kopit y con música y letras de Maury Yeston, se estrenaba en Broadway “Nine”, versión musical de “8 ½”, con el actor Raul Julia en el papel principal (rebautizado como Guido Contini). Esta obra acaparó múltiples éxitos y premios, siendo representada de manera habitual en los escenarios de Estados Unidos desde entonces. Durante mucho tiempo se estuvo barajando la posibilidad de realizar una versión cinematográfica de este musical, sin embargo, el desinterés del público por este género había prologado la adaptación.

nine-trailer-de-la-version-musical-de-ocho-y-medio

Finalmente, tras el éxito de diferentes musicales en la gran pantalla, se escogió al director Rob Marshall (de amplia experiencia en los escenarios y autor de uno de las adaptaciones de mayor éxito, “Chicago”) para que llevara a cabo este proyecto, incorporándose posteriormente un recién oscarizado Daniel Day Lewis (en sustitución de un inicialmente previsto Javier Bardem) y un amplio reparto de actrices (Marion Cotillard, Penélope Cruz, Judi Dench, Nicole Kidman, Kate Hudson, la cantante Fergie y la sin par Sofía Loren). Desgraciadamente, el resultado sería poco reseñable. Todo aquello que de mágico, caótico y original tenía la cinta de Fellini, aquí era transformado en una historia y una puesta en escena convencionales, rutinarias y artificiales. La obra de Marshall puede parecer elegante, lujosa y atractiva a la vista, pero en su interior resulta hueca y pretenciosa, saldándose en un estrepitoso fracaso de crítica y público.

13. CONCLUSIÓN

fellini

Debido a su carácter confesional y absolutamente intimista, “Fellini 8 ½” es una de esas películas que son difíciles de entender más allá de la figura de su autor, de ahí la dificultad de imitarla, parodiarla, homenajearla o copiarla. Los mejores esfuerzos han sido aquellos procedentes de artistas que poseían también una fuerte personalidad y que supieron asimilar las intenciones de Fellini a su propio discurso artístico. Sin embargo, por esto mismo, el resultado ha sido obras que guardan poca relación con la cinta que toman como referente: una mera excusa argumental, quizás, y algún guiño cinéfilo a sus secuencias más representativas. Afortunadamente, para todo lo demás, sigue siendo necesario acudir a la fuente original.

marcello2