DONACCIÓN. DISCAPACIDAD PSÍQUICA EN EL CINE

El ser humano siempre ha aspirado a la perfección, nuestros héroes y estrellas deben contar siempre con un físico y un intelecto envidiable que marque su superioridad sobre el resto de los mortales. Esto es una constante que siempre ha acompañado a la humanidad y que ha quedado reflejada en cualquiera de las diferentes formas culturales con las que tendemos a reflejar las características de nuestra sociedad. De hecho la fealdad, la deformidad, o la mera discapacidad siempre han sido vistas desde una perspectiva maniquea como un reflejo de la maldad, e incluso de la conexión con el diablo. No siempre la discapacidad de una persona es visible, en ocasiones se debe a problemas mentales, que también han supuesto causa de rechazo por parte de la sociedad. Sin embargo, afortunadamente las cosas cambias, y contamos también con historias donde la lucha contra las limitaciones que algunas personas deben sufrir se convierten en una muestra de superación personal, que deberían servir de ejemplo para todos. Esto ha pasado a convertirse también en un género con identidad propia, y en el cine nos gusta de aplaudir la habilidad de los actores para transformarse e interpretar personajes con alguna discapacidad. Para muestra siempre tenemos ese lugar común que nos dice que para ganar un Oscar un actor sólo tiene que interpretar a un discapacitado.

Esto quedaba claro en la que posiblemente sea la película que mejor ha sabido tratar este tema, “Alguien Voló sobre el Nido del Cuco”. Basada en la novela de Ken Kesey, y llevada a la gran pantalla por el realizador de origen checoslovaco Milos Forman en el año 1975, se trata de un canto a la rebeldía contra cualquier sistema social opresor de la libertad de sus individuos. La fragilidad de los diferentes personajes que pueblan la cinta pasa a ser el resultado del desalmado tratamiento con el que la sociedad somete a cualquiera que no se ajusta a sus patrones de normalidad establecidos. Una vez más nos encontramos aquí con la defensa del marginado, que acaba siendo también un ejemplo de humanidad frente a la crueldad y la incomprensión del equipo médico encabezado por la demencial enfermera Ratched. Jack Nicholson y Louise Fletcher ganaron sendos Oscars en el apartado de interpretación por sus excelentes trabajos.

También “Rain Man” es un título a destacar por su representación del autismo, un desorden del desarrollo del cerebro que deteriora la comunicación e interacción social del individuo, causando un comportamiento restringido y repetitivo. En esta ocasión el papel principal recayó en manos de Dustin Hoffmann quien se esforzó en reflejar de manera fidedigna la conducta de este tipo de enfermos, recibiendo por ello su segundo Oscar en 1989.

En “¿A Quién Ama Gilbert Grape?” nos encontramos también una historia de relación de dependencia entre dos hermanos, uno de ellos con retraso mental, agravada por la presencia de una madre con obesidad mórbida que le impide abandonar la casa familiar. El papel del hermano pequeño recayó en un joven Leonardo DiCaprio, quien hasta ese momento era únicamente conocido por su papel en la serie de televisión “Los Problemas Crecen”. Esta película le proporcionó su primera nominación a los Oscars, algo que no volvería a repetirse hasta 11 años más tarde, en 2005 con su papel del magnate Howard Hughes en “El Aviador”. Además el mismo año en que se estrenaba “¿A Quién Ama Gilbert Grape?”, Di Caprio estrenaba también otro drama, “Vida de este Chico”, iniciando así una prometedora carrera cinematográfica.

El autismo es también el tema principal de la polémica cinta “Los Diablos”, acerca de dos hermanos huérfanos que deben enfrentarse a su soledad y la incomprensión de la sociedad, intentando mantenerse unidos a pesar de la enfermedad de ella. Aquí el director Christophe Ruggia obtiene desgarradoras interpretaciones de sus dos debutantes protagonistas, especialmente de la joven Adèle Haenel, quien ofrece un realista retrato de la enfermedad.

Las presiones de la sociedad vuelven a ser el punto de conflicto de “Shine”, biopic del pianista David Helfgott, considerado un niño prodigio a los 14 años, pero que debido a las presiones sometidas por un padre estricto, cayó en una depresión nerviosa que le mantuvo más de una década alejado de toda actividad concertística, mientras recibía tratamiento psiquiátrico, sin terminar de recuperarse nunca de sus terribles traumas. La cinta sirvió de lanzadera para la carrera del actor Geoffrey Rush, quien además obtuvo por su trabajo el reconocimiento del Oscar de la Academia de Hollywood al mejor actor.

La figura del genio loco es también la protagonista de otro biopic, “Una Mente Maravillosa”, acerca del matemático John Forbes Nash. El atractivo y altamente excéntrico Nash hizo un descubrimiento asombroso al comienzo de su carrera y se hizo famoso en todo el mundo. Sin embargo, su fulgurante ascenso se vio truncado debido a sus ataques de esquizofrenia. Tras varias décadas Nash logró superar su tragedia, recibiendo el premio Nobel en el año 1994. Una vez más todo el peso de la película recae sobre los hombros del actor encargado de representar al personaje protagonista, Russel Crowe, quien, siguiendo la tradición, obtuvo una nominación al Oscar por su trabajo.

El retraso mental ha sido también reflejado en varias ocasiones por el cine. En la cinta de Robert Zemeckis, “Forrest Gump”, el personaje protagonista, a pesar de su limitado coeficiente intelectual, consigue triunfar en la vida gracias a su inocencia y humanidad, paseándose por algunos de los escenarios más determinantes de la reciente historia de Estados Unidos. Un año después de ganar su primer Oscar como enfermo de Sida en “Philadelphia”, Tom Hanks recogió su segunda estatuilla después de ganarse el corazón de crítica y público con su interpretación.

En 1996, Billy Bob Thorton se encargó de llevar a la pantalla “El Otro Lado de la Vida”, basada en su propia obra de teatro acerca de un hombre de facultades mentales retrasadas, maltratado de niño por unos padres religiosos y fanáticos, que le consideraban un castigo de Dios. Tras pasar 25 años en un centro psiquiátrico por asesinar a su madre y a su amante al encontrarlos haciendo el amor deberá readaptarse a la vida en sociedad. Thorton, en aquel momento un desconocido para el gran público, obtuvo un Oscar al mejor guión adaptado y una nominación como mejor actor.

También “Yo Soy Sam” presentaba un tema delicado, en el que el protagonista, un deficiente mental, debía luchar en los tribunales para conservar la custodia de su hija pequeña, ya que el Estado consideraba que no estaba capacitado para hacerse cargo de su educación. Una vez más vemos como el amor y la humanidad no están reñidos con la capacidad mental, y como la estructura de la sociedad presenta siempre obstáculos insalvables a aquellos que lo tienen más difícil. La película supuso una vez más una oportunidad para que su actor protagonista, Sean Penn, pudiera lucirse con su interpretación y fuera nominado a los Premios de la Academia de ese año.

Las difíciles relaciones familiares cuando hay una persona con discapacidad psíquica quedan también reflejadas en la cinta española “León y Olvido”, con la peculiaridad de que en esta ocasión el personaje de León está interpretado por Guillem Jiménez, actor con síndrome de Down. Aquí dos hermanos, huérfanos desde hace cinco años deben luchar por mantener la estabilidad de su relación pese las dificultades que ésta les produce. La relación entre ellos es contradictoria, por un lado les une un gran cariño, por otro discuten sin tregua. Olvido quiere que León tome sus propias decisiones, colabore en casa y aprenda a valerse por sí mismo, pero León sólo desea sentirse protegido y atendido por su hermana.

“León y Olvido” no es la única película en utilizar actores con síndrome de Down. Más recientemente podíamos encontrar la cinta “Yo, También”, protagonizada por Lola Dueñas y Pablo Pineda, acerca de la peculiar historia de amor entre Daniel, un joven discapacitado, y Laura, una de sus compañeras de trabajo, a la que conoce tras incorporarse al mundo laboral, con la que inicialmente entabla amistad y de la que acaba enamorándose pese al tabú y el rechazo social que produce su relación. Uno de los principales aciertos de la cinta fue precisamente entregar el personaje principal a Pablo Pineda, un joven sevillano de 35 años que fue el primer europeo con síndrome de Down en obtener un título universitario. Pineda fue premiado por su trabajo con la Concha de Plata al Mejor Actor en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián de 2009 y fue nominado al premio Goya al Mejor Actor Revelación.

Cerramos este repaso con “Mi Nombre Es Khan”, un título que no sólo aboga por la ruptura de la discriminación de los discapacitados, sino también por un acercamiento y tolerancia entre diferentes creencias, especialmente en un momento de conflictos internacionales como el que vivimos. Co producida por las dos principales industrias cinematográficas mundiales, Hollywood y Bollywood, y protagonizada por dos estrellas del cine de la India, Shahrukh Khan y Kajol, la cinta presenta una ambiciosa historia acerca de la conflictiva integración del protagonista, aquejado del Síndrome de Asperger, un trastorno que se manifiesta con dificultades comunicativas, para la interacción social y un comportamiento obsesivo y reiterativo. Khan deberá luchar para llevar una vida normal y poder formar su familia, al mismo tiempo que se enfrenta a los brotes de racismo en Estados Unidos tras el atentado del 11 de Septiembre. Las características de la enfermedad y el deambular del protagonista por un escenario real han hecho que la película haya sido definida como un cruce entre “Rain Man” y “Forrest Gump”.

Como hemos podido ver, todas estas películas vienen a reflejar dos temas importantes como son la visibilidad y la normalización de la figura del discapacitado. A través de ellas, el cine busca poner su granito de arena a la hora de que estas personas dejen de ser marginados e ignorados por la sociedad. Una lucha aún abierta, que desgraciadamente necesitará de muchas más iniciativas y una educación específica para dar verdaderos resultados.