Animada por las extraordinarias
cifras de la primera entrega, la Disney apostó fuerte por el estreno de “Alicia
A Través del Espejo” y ahora se está enfrentando a lo que ya es considerado a
todas luces un fiasco económico. Si Tim Burton logró su cinta más taquillera en
2010, obteniendo en nuestro país más de siete millones de euros en su primer
fin de semana, su secuela se queda con poco más de un millón (1.248.177 €), una
cifra muy pobre para la inversión económica que hay detrás de la producción y
su promoción. A esto se suma también la paupérrima recepción internacional,
especialmente en Estados Unidos, donde la cinta se estrenaba junto a “X-Men.
Apocalipsis” con clara ventaja para los mutantes. En cualquier caso, una cosa
es Estados Unidos y otra España, donde los alumnos del Profesor X tampoco
tuvieron un arranque brillante y pierden audiencia en su segundo fin de semana,
recogiendo 782.607 €. En tercera posición tenemos “Angry Birds”, también por
debajo de sus ambiciosas expectativas y en su tercer fin de semana sólo recauda
580.238 €. Por su lado, “El Libro de la Selva” ya puede dar su paso por las
carteleras españolas como saldado con nota. Tras 7 semanas, mantiene la cuarta
posición con 321.489 €, que con lo acumulado le reporta hasta la fecha cerca de
16 millones de euros en nuestro país. Cierra el ranking la cinta modesta del
grupo, la producción francesa “Un Doctor en la Campiña”, que con mucho menos
respaldo promocional reúne en su primer fin de semana 209.231 € recogidos en
las 77 salas donde se exhibe (frente, por ejemplo, a las 688 de Alicia). Con
estas cifras, con la fría recepción de los últimos blockbusters que han llegado
a nuestras salas, y ateniéndonos al recelo generado a través de internet en
base a los trailers presentados, todo parece apuntar a que el estreno estrella
de esta semana, “Warcraft. El Origen”, sí podrá conquistar el primer puesto de
la taquilla, pero lo tiene complicado para obtener los réditos económicos
esperados para una producción de este calibre. Frente a este título nos llega
también dos películas españolas (el thriller “Acantilado” y la comedia
“Nuestros Amantes”), una cinta de animación francesa (“El Reino de los Monos”),
un drama de corte social (“Idol”) y una comedia materno-filial (“Una Madre
Imperfecta”). (Datos taquilla: Rentrak)
La directora Helena Taberna se dio a
conocer en el año 2000 con el drama “Yoyes”, tras lo cual ha alternado el cine
documental (“Extranjeras”, “Nagore”) con la ficción (“La Buena Nueva”). Su
último trabajo, “Acantilado”, se inspira en un hecho real que tuvo lugar en
Tenerife en 1998 (aunque el rodaje se desarrolló en localizaciones de la isla
de Gran Canaria) y que también sirvió de base para el libro de Lucía Etxebarría
“El Contenido del Silencio”. La cinta está protagonizada por Ingrid García
Jonsson y Daniel Grao, a los que acompañan, entre otros, las actrices Juana
Acosta y Goya Toledo.
Una joven, Cordelia, es reclutada por
una secta en las Islas Canarias. Meses más tarde, su hermano, Gabriel, recibe
una llamada que se ha producido un suicidio en masa que implica a personas de
la secta. Gabriel se traslada a la isla para investigar sobre su hermana.
Miguel Ángel Lamata inició su carrera
en el terreno del largometraje de la mano de Santiago Segura, con comedias
gamberras como “Una de Zombis” o “Isi/Disi. Alto Voltaje”. Tras estos dos
títulos se ha mantenido vinculado al género del humor, pero desde una
perspectiva más romántica. Tras “Tensión Sexual No Resuelta” Lamata nos presenta “Nuestros Amantes” (que no sólo
escribe y dirige, sino en la que además debuta en la producción), donde cuenta
con un cuarteto protagonista de lo más seductor: Eduardo Noriega, Michelle
Jenner, Amaia Salamanca y Gabino Diego (cada vez menos pródigo en el cine y al
que no veíamos en la gran pantalla desde 2005 con “La Daga de Rasputín”), a los
que hay que añadir también la participación de Fele Martínez como secundario de
lujo.
Carlos es un escritor de guiones de
cine de unos 40 años frustrado profesionalmente. Irene tiene unos 30 años y no
tiene claro qué hacer con su vida. Sobre ellos aún planean las sombras de sus
antiguas relaciones: María y Jorge. Cuando Irene se encuentra con Carlos en una
librería-café, sin conocerle de nada, se acerca a él y le propone un juego:
convertir sus vidas anodinas en una aventura. Irene es una soñadora nata.
Carlos ha olvidado cómo soñar. Juntos harán lo imposible por lograr ser
felices. Sólo hay una norma: no enamorarse.
La vida de Jamel Debbouze bien podría
dar para una película. Pese a haber perdido un brazo tras ser arrollado por un
tren a los 15 años, el artista ha sido todo un ejemplo de superación personal,
consiguiendo convertirse en un actor y showman de gran fama y prestigio en
Francia. Con “El Reino de los Monos” afronta dos nuevos retos en su carrera, no
sólo debuta como guionista y director de un largometraje (además de voz en la
versión original del personaje protagonista), sino que además éste es una cinta
de animación, con la complejidad añadida que ello conlleva. La cinta es una
coproducción entre Francia, Italia, China y Bélgica y da una versión un tanto
particular del origen de nuestra especie.
Edouard, hijo mayor del rey de los
simios, no es como los demás: más pequeño, mucho menos peludo y con una de sus
extremidades inutilizada. Pero estas rarezas, unidas a su ingenio, también
pueden significar que es el primer eslabón en la evolución de la especie.
Resulta increíblemente ingenioso, descubre el fuego, la caza, el hábitat
moderno y el amor, e incluso la esperanza. Generoso, quiere compartirlo todo.
Revoluciona el orden establecido y acaba por conducir a su pueblo con humor
hacia la evolución del ser humano.
El director Hany Abu-Assad ha
utilizado su cine para reflexionar en torno al conflicto palestino-israelí desde
diferentes perspectivas. Cintas como “Paradise Now” u “Omar” han dado muestra
de su habilidad para tratar temas conflictivos y delicados de manera inteligente,
emotiva y elegante, siempre rompiendo estereotipos. Este mismo enfoque parece
predominar en su último trabajo, “Idol”, donde utiliza los sueños y el espíritu
de superación del protagonista (interpretado por Tawfeek Barhom) para aportar
una perspectiva esperanzadora y constructiva de la situación de los palestinos
en Gaza.
Mohammad, un chico de Gaza, sueña con
cantar en el teatro de la ópera de El Cairo y que todo el mundo oiga su voz. De
algún modo, logra escapar de la prisión que es Gaza y llegar a las audiciones
que se celebran en El Cairo para Arab Idol, el popular concurso de talentos de
televisión. A medida que va avanzando para llegar a las rondas finales de la
competición, deberá afrontar sus propios miedos y asumir el control de su
destino para traer esperanza y felicidad a toda una región. Mohammad ha
emprendido el viaje de su vida.
La primera vez que oímos hablar de
Lorene Scafaria fue gracias a su guion de la cinta de culto “Nick y Nora, Una
Noche de Música y Amor”, adaptación de la novela homónima de Rachel Cohn y
David Levithan. A continuación debutó como directora con “Buscando un Amigo
para el Fin del Mundo”, a partir de un guion original suyo y protagonizada por
Steve Carell y Keira Knightley. Ahora reúne a dos actrices del calado de Susan
Sarandon y Rose Byrne para presentarnos “Una Madre Imperfecta”, una comedia
amable sobre las relaciones materno-filiales, en la que también encontramos a
los actores J.K. Simmons, Jerrod Carmichael, Cecily Strong, Lucy Punch y
Michael McKean.
Con un nuevo iPhone, un apartamento
cerca del Grove y una cuenta corriente desahogada (que le ha dejado su querido
y difunto marido), Marnie Minervini se traslada encantada de Nueva Jersey a Los
Ángeles para estar cerca de su hija, Lori, una guionista de éxito –aunque aún
soltera– , y asfixiarla con su amor materno. Pero, cuando las docenas de
mensajes de texto, visitas inesperadas y conversaciones dominadas por consejos
no solicitados obligan a Lori a fijar unos estrictos límites personales, Marnie
encuentra maneras de encauzar su eterno optimismo y su vehemente generosidad para
cambiar las vidas de los demás –así como la suya propia– y encontrar una nueva
meta en la vida.
“Warcraft. El Origen” supone el salto
a la gran pantalla de una de las sagas de videojuegos más populares de los
últimos 20 años. Iniciada por Blizzard Entertainment en 1994, la serie de
“World of Warcraft” partía del modelo de los juegos de rol y estrategia para
crear un formato de juego posteriormente imitado hasta la saciedad (incluso por
la propia Blizzard con su variante de ciencia ficción “Starcraft”). La
adaptación cinematográfica de este juego había sido fuente de todo tipo de
rumores durante años, hasta que finalmente Legendary Pictures, junto con la
propia desarrolladora de videojuegos, apostaron por llevar a cabo este
proyecto. El director escogido fue Duncan Jones, quien contaba en su haber con
los buenos resultados de crítica y público obtenidos con “Moon” y “Código
Fuente”. Para encarnar a humanos y orcos, el director ha contado con los
actores Travis Fimmel, Toby Kebbell, Paula Patton, Ben Foster, Dominic Cooper,
aunque gran peso de la cinta lo acaparan los efectos digitales, con los que se
espera deslumbrar a los espectadores y, especialmente, a los seguidores de los
videojuegos.
El pacífico reino de Azeroth está a
punto de entrar en guerra para enfrentarse a unos terribles invasores: orcos
guerreros que han dejado su destruido mundo para colonizar otro. Al abrirse un
portal que conecta ambos mundos, un ejército se enfrenta a la destrucción, y el
otro, a la extinción. Dos héroes, uno en cada bando, están a punto de chocar en
un enfrentamiento que cambiará el destino de su familia, su pueblo y su hogar.
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